La lavanda o lavándula es una planta aromática muy conocida por su agradable olor y por las diferentes propiedades que posee.

Hay alrededor de 60 especies y se le conoce también como espliego, cantueso o alhucema. 

Los colores púrpura y violeta son los más comunes, aunque también las hay blancas, azules y rosadas. Incluso tiene su propio color: lavanda.

Se utiliza como planta ornamental, para alejar insectos y el aceite esencial que se extrae de ella se emplea para cosmética, perfumería y en la industria farmacéutica.

En cuanto a la palabra lavanda se cree viene del latín “lavere” que significa lavar, ya que en la antigüedad era usada para bañarse y perfumar la ropa.

Se sabe que era utilizada por:

– Los romanos para aliviar la picadura de insectos y para repelerlos.

– Los egipcios hacían perfumes con ella y también la usaban en el proceso de embalsamamiento.

Beneficios

Los beneficios de la lavanda son muchos y variados, ya que es calmante, sedativa, curativa, purificante, repelente, además es buena para la piel.

Calmante

Es conocida por su efecto calmante, por lo que ayuda a dormir y a aliviar el estrés, la ansiedad, el agotamiento y a tener claridad.

Para dormir bien aconsejan:

– Colocar una bolsa de tela con flores de lavanda bajo la almohada.

– Beber una taza de té de lavanda antes de dormir.

Este té se puede hacer en casa al sumergir flores de lavanda secas o frescas en agua hirviendo y dejarlas reposar entre 15 y 20 minutos.

Si se tiene la planta dentro de la habitación sirve para reducir la tristeza, el estrés y la ansiedad.

Al utilizar aceite esencial de lavanda en un difusor relaja.

Piel

Tonifica la piel del rostro, elimina bacterias, cicatriza, limpia y refresca al utilizarlo en jabones.

La emplean también para reducir el exceso de sudoración en los pies que produce el mal olor.

Repelente

Es excelente para aliviar las picaduras y repeler polillas e insectos, solo hay que frotar lavanda en brazos y piernas.

Una fórmula para perfumar la ropa y a la vez repeler los insectos de un libro muy antiguo dice que se hierve la lavanda en agua, luego se sumerge la prenda en esa agua, se escurre, se deja secar y está lista para usarse.

En cuanto a repelerlos de la vivienda, se cuelgan estas plantas en la parte exterior, lo que también da un buen aroma.

Sus flores secas se colocan dentro de una bolsa de tela y se llevan closets o cajones para ahuyentar polillas y otros insectos.

Cómo secar las flores de lavanda

La floración de esta planta depende de la especie, sin embargo, por lo general a mediados o finales de Julio es la oportunidad para recolectarlas.

El procedimiento para secarlas es el siguiente:

1, Recoger las flores.

2. Formar ramilletes y atarlos con un hilo.

3. Colgarlos boca abajo en una habitación bien ventilada, sin corrientes de aire ni exposición al sol.

Toma de 1 a 2 semanas para que las flores se sequen, es entonces cuando se pueden guardar en las bolsas y colocarlas en los lugares donde se quiere ahuyentar insectos o para aromatizar.

Aromatizador

El aceite esencial de lavanda se pueden utilizar en diferentes mezclas para una variedad de aplicaciones, en este caso para hacer un aromatizador según elmueble.com.

Ingredientes

80 ml de agua destilada

20 ml de alcohol

15 gotas de aceite de lavanda

Se mezclan bien y se guarda en un envase de vidrio, ya sea para agregar al difusor o para verterlo en un envase con rociador y aromatizar el ambiente, ropa de cama, toallas o cortinas.

La lavanda se puede utilizar, además de en aceite esencial, en jabones, velas, sales de baño, etc.

Fuentes: almanac.com, physalishealth.com, elmueble.com.